viernes, 11 de enero de 2013

Neruda despidió así a Miguel Hernández


A la muerte de su amigo, el poeta chileno escribiría algo que podría considerarse la definición de la palabra alumbrar en todas sus acepciones:
.
“Recordar a Miguel Hernández, que desapareció en la oscuridad, y recordarlo a plena luz, es un deber de España, un deber de amor. Pocos poetas tan generosos y luminosos como el muchachón de Orihuela cuya estatua se levantará algún día entre los azahares de su dormida tierra. No tenía Miguel la luz cenital del Sur como los poetas rectilíneos de Andalucía sino una luz de tierra, de mañana pedregosa, luz espesa de panal despertando. Con esta materia dura como el oro, viva como la sangre, trazó su poesía duradera. ¡Y este fue el hombre que aquel momento de España desterró a la sombra! ¡os toca ahora y siempre sacarlo de su cárcel mortal, iluminarlo con su valentía y su martirio, enseñarlo como ejemplo de corazón purísimo! ¡Darle la luz! ¡Dársela a golpes de recuerdo, a paletadas de claridad que lo revelen, arcángel de una gloria terrestre que cayó en la noche armado con la espada de la luz!”


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Orígenes del Castella: Juan Fernando Cerdas "A través del arte los criterios de evaluación varían, la autoestima se puede fomentar de otra manera al igual que la capacidad creativa".

 Tomada de la Revista UNA Entré al Castella en el año 1958 a tercer grado, no porque me interesaba la actividad artística. Mis papás habían ...