La soledad era eterna
y el silencio inacabable.
Me detuve como un árbol
y oí hablar a los árboles.
De Árboles Hombres de J.R. Jiménez
Tomada de la Revista UNA Entré al Castella en el año 1958 a tercer grado, no porque me interesaba la actividad artística. Mis papás habían ...